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El amor entre personas del mismo sexo es algo completamente normal y está protegido por las leyes de México. Actualmente en la legislación de casi todos los países de occidente la comunidad LGBT tiene los mismos derechos que cualquier otro ciudadano. A pesar de eso las muestras de homofobia son un fenómeno diario. Y es de reconocer que una parte importante de las expresiones homofóbicas están motivadas por motivos religiosos
Este fue el caso de una monja en Italia que decidió interrumpir el beso entre dos mujeres para decirles que lo que estaban haciendo no era correcto. Sin embargo lo más divertido del caso es que las mujeres que se besaban ni siquiera eran pareja sino que estaban actuando como parte del rodaje de una serie llamada Ferrari.
«Qué están haciendo? ¿Qué están haciendo? ¡¡¡Esto es del diablo!!!”, irrumpió la monja molesta contra las dos mujeres.
A continuación las actrices le comunicaron a la monja que estaban trabajando, pero ella simplemente las ignoro y siguió arengando. Acto seguido, los camarógrafos tuvieron que entrar en escena para tratar de comunicarse de nuevo con la monja pero ella siguió sin entender. Solo hasta un rato después ella se marchó completamente indignada.
“Señora, señora, estamos trabajando”, comentaron los camarógrafos a la religiosa que no cedió hasta momentos después diciendo al irse: «Jesús, Jose y María».
El hilarante momento fue subido a las redes sociales de la serie «Ferrari» bajo el título «Dios no ama a los LGBT». A partir de ese gesto algunos usuarios sospecharon que todo se trataba de un montaje, ya que les parecía demasiada coincidencia toda la situación. Sin embargo los productores de la serie hablaron:
«Se está discutiendo la veracidad del video y les puedo asegurar que es todo verdad”, señaló el productor Luigi Sgambatto . “Nada de lo sucedido se construyó ni se preparó y tampoco esperábamos todo esto. Un beso entre dos mujeres no puede ser visto como algo “del diablo”. Espero que la difusión sirva para algo”.
La comunidad religiosa también se expresó:
«Ella ha reaccionado, en su recta conciencia, llena de celo por la verdad de la moral objetiva, haciéndoles entender que lo que estaban haciendo está moralmente mal (…) el problema es que hoy en día parece que muchos tenemos miedo a defender en público nuestra fe y a defender la lógica del bien, de lo bueno, lo verdadero, lo bello”, señaló el padre Miguel Livestre. (Tomada de Quinto Poder)
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