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Día clave para el olimpismo

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Hasta 10 temas a tratar en la 136a. Sesión del COI

Por primera vez en la historia, la Sesión del COI, la asamblea plenaria del primer organismo deportivo mundial, se reunirá hoy telemáticamente, bajo el impacto del reciente aplazamiento de los Juegos de Tokio al año 2021 y los de la Juventud de Dakar a 2026 y sin saber en qué medida la evolución de la pandemia de permitirá el retorno de la actividad deportiva.

Las condiciones en las que se celebrarían los Juegos dentro de un año, los problemas de corrupción que arrastran federaciones como las de halterofilia y boxeo, las protestas políticas de los atletas y la elección de nuevos miembros y cargos deben caber en la agenda, muy comprimida, de la 136a. Sesión, que presidirá a distancia Thomas Bach en el penúltimo año de su mandato.

Estos son algunos asuntos que la Sesión tendrá sobre la mesa:

El futuro de Tokio. Esta reunión de la asamblea olímpica debía haberse celebrado en Tokio, en vísperas de la inauguración de los Juegos el día 24 de julio. El aplazamiento de los Juegos hasta 2021 ha abierto un sinfín de interrogantes a los que el COI aún tiene que dar respuesta. El comité organizador presentará un informe ante el cónclave olímpico que permitirá conocer en qué se ha avanzado, y en qué no, desde el cambio de fecha decidido en marzo. Por ahora, se conoce el deseo de “simplificar” los Juegos y centrarse en lo imprescindible, para frenar el sobrecoste derivado del nuevo calendario.

Al término de la reunión de la Comisión Ejecutiva celebrada el martes, Thomas Bach describió con un nuevo calificativo cómo será la edición de Tokio: “frugal”.

Dakar, mala iniciativa

La Ejecutiva propondrá a la asamblea que ratifique una decisión que ya no tiene marcha atrás: el aplazamiento de los Juegos de la Juventud de Dakar de 2022 a 2026. La primera competición olímpica en el continente africano ha resultado una operación fallida.

Bach explicó que el desbarajuste en el calendario deportivo causado por la pandemia de Covid-19 hacía imposible presentar a tiempo unos Juegos bien preparados. Pero otras fuentes comentaron que los problemas derivados del coronavirus no hicieron sino terminar de sentenciar unos Juegos que arrastraban problemas organizativos y presupuestarios.

La asamblea no tendrá más remedio que aprobar el aplazamiento. Después de verse obligado a cambiar la fecha de Tokio 2020, tener que saltarse una edición de los Juegos de la Juventud es un síntoma del momento crítico en el que la pandemia ha sumido al Movimiento Olímpico.

Deportes en la mira. Un informe elaborado hace un mes por el profesor canadiense Richard McLaren, el mismo que destapó el dopaje de Estado en Rusia, denunció prácticas generalizadas de “corrupción al más alto nivel” en la Federación Internacional de Halterofilia (IWF) durante las cuatro décadas de mandato del húngaro Tamás Aján, que dimitió en enero.

Compra de votos, cuentas ocultas, encubrimiento de 40 casos de dopaje “incluyendo a medallistas mundiales” y desvío masivo de fondos, con 10.4 millones de dólares fuera de control, fueron algunas de las irregularidades detectadas por McLaren.

Aján fue miembro del COI entre 2000 y 2010.

La federación internacional de boxeo (AIBA), por su parte, está inhabilitada desde marzo de 2019 por irregularidades económicas, administrativas y arbitrales y a cargo de un presidente interino tras la renuncia del uzbeko Gafur Rakhimov, incluido en la lista negra del Departamento del Tesoro estadounidense por su presunta vinculación con mafias de la droga.

Los días 12 y 13 de diciembre está convocado el congreso en el que la AIBA debe elegir nuevo presidente y adoptar una nueva constitución, medidas imprescindibles para que el COI levante la suspensión.

En caso de que haya novedades sobre estos casos, la asamblea será informada.

Rusia y el dopaje. El atletismo ruso está suspendido desde 2015 y espera ahora el dictamen de World Athletics, que no ha recibido en el plazo estipulado el pago de una multa de 5 millones de dólares, paso previo para su rehabilitación.

El presidente de la Federación Rusa de Atletismo, Yevgueni Yúrchenko, anunció este lunes su dimisión.

A la vez, el deporte ruso al completo está castigado por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), y por ende por el COI, con cuatro años de aislamiento internacional por connivencia con el dopaje, por lo que los deportistas rusos solo podrán competir como neutrales en los Juegos de Tokio y los de Invierno de Pekín 2022.

Pasan los meses y la patata caliente de las sanciones a Rusia sigue estando en la agenda del COI reunión tras reunión.

La Regla 50. La Carta Olímpica, en su Regla 50, prohíbe toda manifestación “de propaganda política, religiosa o racial” en cualquier sede olímpica.

Pero, tras las protestas a las que se sumó de forma generalizada el mundo del deporte por el homicidio de George Floyd, son muchas las voces que consideran que realizar algún tipo de gesto contra el racismo es la mejor defensa que se puede hacer de los valores olímpicos.

Entre esas voces han sonado alto las de John Carlos, el atleta expulsado de los Juegos de México 1968 por levantar el puño en el podio en protesta por la segregación racial, y la asociación Global Athlete, que reúne a deportistas con las esferas dirigentes del deporte.

“El COI no puede seguir penalizando a los deportistas que defienden sus convicciones, sobre todo cuando estas convicciones ilustran los objetivos del olimpismo”, dice una carta firmada por Carlos.

La Comisión de Atletas de Panam Sports también ha abierto un debate sobre la Regla 50 y ha pedido a los deportistas del continente americano que le envíen sus opiniones.

Las elecciones.El español Juan Antonio Samaranch y el turco Ugur Erdener cumplen sus mandatos como vicepresidentes del COI y deben ser reemplazados. Salvo sorpresas de última hora, solo hay dos aspirantes, por lo que ambos tienen el puesto asegurado.

Uno es el singapurés Ser Miang Ng, que ya está en la Comisión Ejecutiva. Ng es uno de los consejeros del Valencia CF y presidente del Patronato de la fundación del club. El otro es el australiano John Coates, presidente de la Comisión de Evaluación de Tokio 2020. Los dos ocuparon ya una vicepresidencia en el pasado y ahora se unirán a los otros dos vicepresidentes aún con mandato en vigor, la estadounidense Anita DeFrantz y al chino Zaiqing Yu.

Sin embargo, Yu también deberá someterse a un voto porque en 2021 cumple 70 años, edad de jubilación en el COI. La Ejecutiva pedirá a la asamblea que le prolongue su estancia en el organismo hasta 2025, dado su peso en el deporte chino. Es vicepresidente del comité olímpico de su país, que organizara los Juegos de Invierno de 2022 en Pekín.

La vacante en la Ejecutiva que deja Ng y la que, por fin de mandato, libera el ucraniano Sergey Bubka serán cubiertas por dos de estos cuatro candidatos: la filipina Mikaela Jaworski, la etíope Dagmawit Berhane, el belga Pierre-Olivier Beckers-Vieujant y el argentino Gerardo Werthein.

En 2021 toca convocar elecciones a la presidencia del COI, tras el primer mandato de 8 años de Thomas Bach. Pero el alemán tiene derecho a un segundo y último periodo de cuatro años y es improbable que haya otro aspirante con opciones de arrebatarle el cargo.

Nuevos miembros.La asamblea olímpica votará su propia ampliación con cinco nuevo miembros. Entre ellos figuran dos grandes nombres de la historia del deporte: la cubana María Caridad Colón, primera latinoamericana que fue campeona olímpica (oro en jabalina en Moscú 1980), y el británico Sebastian Coe (oro en 1,500 m en Moscú 1980 y Los Ángeles 1984), actual presidente de World Athletics.

Junto a ellos accederán a la asamblea del COI, si el voto es favorable, la expresidenta de Croacia Kolinda Grabar-Kitarovic, la princesa saudí Reema Bandar Al-Saud, embajadora de su país en Estados Unidos, y el mongol Battushig Batbold, presidente en funciones de su comité olímpico nacional.

Futuras candidaturas. Elegidos ya los Juegos de verano y de invierno hasta el año 2028, el COI informó en junio de que estaba ya en conversaciones con las ciudades o regiones interesadas en las ediciones de invierno de 2030 (Barcelona, entre ellas) y de verano de 2032. Es probable que la crisis sanitaria obligue a nuevos ritmos en el proceso de candidaturas y preselección de las futuras sedes olímpicas.

Cien personas. Cien son los miembros actuales del COI. Todos ellos, junto al personal directivo del Comité y de sus comisiones de trabajo, los organizadores de los próximos Juegos Olímpicos y distintos invitados deberán debatir, votar y hacerse entender de forma telemática. Es la primera vez. La asamblea olímpica suele ser muy participativa, pero esta vez las intervenciones estarán condicionadas por el medio y por el tiempo: una agenda que habitualmente se prolonga durante tres jornadas se ha concentrado en solo cuatro horas.

Nueva agenda. Si los Juegos de Tokio se disputan con normalidad, lo habitual es que el COI celebre en los días previos una Sesión. Pero la Sesión de 2021, que incluye la elección de presidente, ya estaba concedida a Atenas. Y es poco probable que Thomas Bach acuda a la reelección antes de los Juegos.

El organismo debe reorganizar su agenda y considerar la opción de mantener dos sesiones en 2021, antes y después de Tokio 2020.

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