Una sequía atenuada se vivirá hasta abril, con regulares lluvias en mayo y junio; una sequía extrema de tres semanas en julio, para luego retornar la humedad y cerrar los últimos meses del año con intensas lluvias hasta la primera semana de diciembre.
Así lo pronostican los integrantes del colectivo Xok k’iin, quienes estudiaron las cabañuelas durante enero y parte de febrero, ya que no solo analizan las condiciones climáticas en ese período, sino también estudian el comportamiento de la flora y la fauna, con lo que integran el pronóstico del clima para el resto del año.
La metodología de Xok k’iin plantea que la observación, registro y pronóstico no concluye con los datos observados en enero, sino que deben complementarse con los datos que aporten los bioindicadores.
Esos datos son los que ayudarán al ajuste del pronóstico general en torno al acontecer climático local, datos que son de interés para la práctica de las milpas.
Bernardo Caamal Itzá, comunicador e integrante del citado colectivo, detalla los resultados de esas observaciones: muestran que de enero a abril el clima será bastante seco, como lo ha sido los últimos seis años.
Sin embargo, será una sequía atenuada por algunas lluvias que se tendrán por intervalos entre los primeros cuatro meses de este 2021.
El agrónomo señala que se tendrá un poco más de homogeneidad en las lluvias para este 2021 en el territorio maya peninsular, lo que hará que sea un año con más presencia de humedad, a diferencia de los últimos seis años.
El estudio, apunta, mostró que en mayo se tendrán lluvias regulares; es decir algunas precipitaciones, pero no intensas. A mediados de junio se anticipan algunas lluvias intensas, pero disminuirán en las últimas semanas del mes de junio y gran parte de julio (las primeras tres semanas de este mes), de forma tal que julio será un mes con una sequía extrema.
En agosto se reanudarán las lluvias y en septiembre se tendrá un ligero descenso en las precipitaciones.
Al igual que en 2020, en octubre y noviembre habrá un repunte en las precipitaciones, que proseguirá hasta la primera semana de diciembre como consecuencia de la actividad ciclónica.
Por los registros de esa actividad en la región se determinó que este año será u ja’abil chak yéetel mamancháak. De acuerdo con el significado que se da en la cultura maya ancestral, quiere decir que habrá lluvias irregulares con breves lapsos de sequía durante todo el año.
El estudio de las cabañuelas mayas o xok k’iin es observado, analizado y documentado desde hace 16 años por el colectivo del mismo nombre, del que son parte milperos, estudiantes y profesionales, así como personas interesadas en el tema.
Los pronósticos presentados son resultado del consenso de las observaciones de todos los integrantes del colectivo, 35 personas, quienes afirman que las cabañuelas mayas son un modelo aún vigente y aplicado en las milpas, que se relaciona con las semillas que se cultivan desde antaño.
El viernes 12 pasado, el colectivo dio a conocer el pronóstico del clima para este año en un programa de radio, que fue reproducido en varias estaciones.
Registro Cabañuelas
Bernardo Caamal explica el comportamiento climático en este cuatrimestre del año, de enero a abril.
Plantaciones
El coordinador del colectivo Xok k’iin manifiesta que el tipo de lluvias que se tiene en estos meses resultará beneficioso para los apicultores por la floración de las plantas melíferas. También beneficiará a la ganadería, pero no es buen clima para el tajonal ni para árboles como el mango, pues las lluvias y el frío no les gusta.
Por internet
El modelo también se alimenta de las observaciones que les hacen llegar personas vía redes sociales.
Comments